Laboratorios Dopamás S.A.,
empresa de fabricación e investigación farmacéutica con sede en Barcelona, ha
firmado un acuerdo con el F.C. Barcelona que le garantiza el derecho exclusivo
de comercializar las hormonas de Messi. Andreu Alsocaire, presidente de la
compañía, ha aclarado que “no se trata de la Levotiroxina que Messi se estuvo
inyectando para desarrollar su metabolismo, sino de las hormonas que el jugador
ha ido generando con posterioridad al tratamiento y que son únicas en el mundo.”
Alsocaire ha obtenido asimismo
permiso del club catalán para desglosar detalles médicos del producto. “Su
tratamiento hormonal en la adolescencia, combinado con 26 horas diarias de
entrenamiento, han provocado que el metabolismo de Lionel fabrique unas
hormonas únicas que se han ido acumulando poco a poco en las piernas en
detrimento de la cabeza. Esto explica por qué el jugador ha aumentado su
resistencia a las lesiones y la calidad en su juego, sin que su inteligencia se
desarrolle ni un ápice desde los quince años.” Alsocaire especifica que las
hormonas han sido bautizadas como “Lionella” y que serán comercializadas en dos
modelos: frascos de 250 y 125 ml, este último para los más pequeños.
Según Dopamás S.A., los
beneficios de la Lionella incluyen el aumento en la coordinación muscular, la
aparición de una sustancia pegajosa en la punta del pie (que duplica sus
efectos al contacto de un balón de cuero) y el desarrollo del acento argentino.
“Estamos trabajando en una versión más potente del producto que tendrá
exactamente las mismas propiedades del original, incluyendo la capacidad de
provocar diarrea a las personas que lleven guantes y la ira de quienes vayan
vestidos de blanco. También creemos que podría inducir a los árbitros a sacar
tarjetas al rival incluso cuando no haya contacto físico, pero no estamos al
100% seguros de esto.”
Los laboratorios han asegurado la
fiabilidad del producto después de testearlo con ratas y cobayas. Los resultados,
según la directiva de la empresa, fueron excelentes: “Un 99% de las ratas
fueron pichichi en sus respectivas ligas y fueron capaces de pronunciar
correctamente palabras como pibe y chamuyero. Sorprendentemente, cada vez que se lesionaban para tres semanas, la duración estimada se reducía a tres días en cuestión de minutos. Por otra parte, un tres de
cada cuatro ratas obtuvieron mejores resultados ante mapaches a los que se les
había inyectado líquido de la glándula suprarrenal de Cristiano Ronaldo.” Alsocaire
ha añadido que existe un único efecto adverso: “los efectos se disiparán hasta
en un 75% si se viste una camiseta albiceleste después de consumir las
hormonas. Estamos intentando solucionar este pequeño inconveniente, pero por el
momento no parece haber solución posible.”
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