Tras casi dos temporadas
deleitando al público estadounidense, Ricky Rubio ha decidido dar un paso
adelante en su integración en la NBA. El base colgó en su cuenta de Twitter la
enigmática frase “I’m a nigger”, que
desató una auténtica avalancha informativa en Internet.
Finalmente y a través del Minnesota Daily, Ricky atendía a una
entrevista personal para aclarar el significado de su tweet. “Yo no provengo de
El Masnou, sino de las profundidades de Detroit. Conozco la calle mejor que
muchos hijos de mamá que arrastran su culo blanco por la cancha”, declaraba al
inicio entrevista. Aunque no especificó por qué su verdadera biografía nunca ha
salido a la luz, sí afirmó que su objetivo es “que se me juzgue por quién soy y
no por el jodido color de mi piel.”
Parte de la expresividad de Ricky
se pierde inevitablemente en la traducción, pero el jugador antiguamente
español empleó muletillas como “yo, yo, ‘ear
me now”, “wassup, muddafuckah” y un
extraño “mú bueno’ día’, bwana”. Reconoció
que su afición al ska catalán es una tapadera para ocultar la pasión que siente
por artistas como Public Enemy, James Brown y Antonio Machín. Ricky recalcó que
se toma muy en serio sus raíces y que procura
culturizarse cada día más sobre “mi hermandad negra, que es un jodido pasote,
tío”, a través las enseñanzas de Martin Luther King, Nelson Mandela y Carlton
Banks.
La entrevista terminó bruscamente
cuando, ante las dudas que mostraba el periodista respecto al supuesto origen
racial de Rubio, éste propuso bajarse los calzoncillos para mostrarle “la prueba
definitiva”.
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