Toquero pone fin a su sequía goleadora marcando en el entrenamiento

El carismático delantero del Athletic de Bilbao, Gaizka Toquero, puso fin a su sequía goleadora este jueves en el entrenamiento matinal. Sus compañeros y aficionados del club vuelven a confiar en el vitoriano, que eleva así a dos goles su cuenta particular de esta temporada contando partidos, entrenamientos y partidas al futbolín.

Sucedió a las 8:15 exactamente, dato anecdótico a simple vista, pero importante teniendo en cuenta que el entrenamiento no estaba programado hasta las 9:30. Gaizka saltó al césped de Lezama empalmando tres noches consecutivas sin dormir, ya que según afirma, "yo no necesito dormir jamás, soy un cyborg, Patxi". Toquero, con un excelso recital ofensivo, se zafó de tres conos hasta que se vio obligado a volver sobre sus pasos al recordar que se había dejado el balón en el banquillo. Acto seguido se regateó a sí mismo y propinó un chut tan potente que se cuenta que el esférico se encuentra ahora mismo en Mendizorroza. aunque luego repitió la operación con otro balón, logrando esta vez colarlo entre los tres palos. Su explosión de júbilo coincidió con la llegada de los primeros compañeros que venían a entrenar.  "Me alegro mucho por él", nos contaba Andoni Iraola. “No recuerdo si la última vez que marcó un gol aún contábamos en nuestras filas con Joseba Etxeberría, pero igualmente, espero que esto eleve aún más si cabe su moral”

El técnico del Athletic de Bilbao, Marcelo Bielsa, habló del acontecimiento en rueda de prensa: "Sí, este... la capacidad anotadora de Gaizka se vio mermada por una reducción en el consumo de complejos vitamínicos y kalimotxo..., unido a un comportamiento fuera de lo normal..., violento..., casi asesino con el resto de su compañeros de cancha... mismamente, en el entrenamiento de ayer desplazó los testículos de sitio de un mordisco al joven Laporte, porque éste le había robado el esférico limpiamente." 

Toquero espera así que en los próximos partidos pueda volver a tener una oportunidad de jugar unos minutos. "El míster decide, pero no tengo ningún inconveniente en cargarme a Fernando, Ibai o Aritz y convertirme así en el delantero titular, ahí va la hostia".